
Hola amig@s!!!
Hoy he escuchado una frase encantadora que me ha llegado al alma, relacionada con unos animales muy bellos y muy queridos por mí y, por algún extraño motivo, he sentido la necesidad imperiosa de contároslo. Ahí va:
"Cuando montamos un caballo, tomamos prestada su libertad"

A mí estos animales me encantan y en uno de ellos se basa una de las películas que más me ha hecho llorar en toda mi vida: Spirit, el corcel indomable. Sobre ella ya hablaré alguna vez, pero necesitaré una entrada completa, sólo os diré que para mí esa película es la definición de libertad.
Bueno, queridos amigos blogeros, me despido hasta pronto.
P.S: recordad tomamos PRESTADA su libertad, no olvidéis devolvérsela... y no me refiero sólo a los caballos.
Yo una vez monté a caballo.
ResponderEliminarY una vez un caballo intentó pisarme la cabeza.
El caballo era el mismo, ambas veces. Desde entonces, nada de caballos, pueden quedarse con su libertad, siempre y cuándo me dejen en paz la cabeza.